Me planto a escribir este artículo el día 8 de marzo; consideré oportuno hablar de Doña Rosario de Acuña justo el Día Internacional de la Mujer Trabajadora, en estos días en que los elementos conservadores de la sociedad se han apuntado a la conmemoración, con el objetivo habitual de mermarla de contenido; incluso acabo de ver en la tele que el PP de Madrid convoca su propia manifestación, con el ánimo de dividir un movimiento pujante. Le quitan al día el apellido, pero es inevitablemente de la Mujer Trabajadora , porque se recuerda el asesinato de unas obreras del textil que fueron vilmente achicharradas por la patronal cuando defendían sus derechos laborales. La Tertulia Encuentros había considerado que el valle del Nalón no conocía suficientemente a Doña Rosario de Acuña y Villanueva, (1850-1923), por lo que decidió traerla a la memoria de la ciudadanía como colofón de los múltiples actos organizados institucional o s...
Quiso el alcalde zanjar el debate que él mismo había provocado. Antes de iniciar el Orden del día se dirigió al pleno municipal con un escrito, no salido de su pluma, que leyó dubitativo, más con miedo a equivocarse que con cuidado; aseguró que estaba de parte de las mujeres, como acreditaban las importantes cantidades al respecto que su equipo había presupuestado. Andaba yo por Oviedo dos días después; me paré, como suelo, donde La Regenta, que está como petrificada en el cruce de calles que llevan a la catedral y al consistorio, pero sin dar cara a ninguna de las dos instituciones, harta de ver que siguen menospreciando a las señoras como en sus tiempos. Concluimos que el Señor Don Alfredo Canteli y Fernández estaba más guapo callado. O menos feo, porque con esa cara adusta de suyo, cuando quiere sonreír saca una mueca. Empezó todo este lío por el asesinato de una mujer . El primero de España este año. Un jubilado...