Tienes el blog abandonado. Y es verdad, no escribo, debordado absolutamente por la recesión; hay una muy preocupante recesión ideológica, es ahora justo cuando es menester mantener la tranquilidad de ánimo.
No encuentro palabras para describir el horror que me produce un chaval de veintipocos años asesinando gratuitamente a la entrada de una escuela. La sangre fría, cogiendo por la espalda a una niña que se le escapaba y rematándola. ¿Hay ideología, religión, cultura que pueda soportar tamaña barbaridad?
Nada disculpa la barnarie, quienes la fomentan son colaboradores necesarios de sus crímenes; en este sentido tengo que preguntarme cómo es posible que la Señora Le Pen disponga de una esperanza de voto del 20% con actitudes tales como pedir que se eche de Francia a los inmigrantes o yendo a bailar con unos alegres "muchachos" vieneses que se reúnen para conmemorar cuando machacaban judíos.
Las Burschenschaften (perdón por el vocablo) son unas Hermandades Estudiantiles cuyos miembros ya no se recuerdan de por dónde están las aulas, que se reúnen cada año en una sonora celebración de mejores tiempos, aquellos en los que era legal perseguir congéneres de otras razas, deporte de amplia tradición europea; son de ver, vestidos con impecables fracs y rematados por unos ridículos sombreritos de colorines que se sostienen de mala manera. Para mayor gracia recuerdan estos tocados a la kippá judía y a ciertos adornos turcos, ¡los blanquitos con la moda de sus enemigos!
Hacia las posiciones políticas de esta señora ha ido derechizando, -sin gran esfuerzo, dicho sea de paso-, su programa el Sr. Sarkozy, preocupado por la pérdida de clientela, ayudado por su ministro del Interior, aquél que cerró la frontera con Italia para que no se colaran tunecinos ni otros africanos muertos de hambre. Es esta repugnante papilla ideológica la que mueve a elementos como el desgraciado Muhammed Merah.
Cuando fue descubierto con tanta rapidez yo ya había apostado que moriría. Toda la historia tiene demasiados elementos oscuros. No me fío nada de los ministros de Interior ni de sus huestes secretas; Sarkozy lo fue, desde su cargo enfrentó con violencia las manifestaciones violentas, fue protagonista de expulsiones masivas y sus servicios secretos prepararon trampas contra sus enemigos políticos, particularemente de su propio partido. Lo de Merah, lamento ser tan suspicaz, me suena a montaje, a forma de ganar votantes.
Primero unos asesinatos que van "in crescendo", el día 11 un militar; el 15, dos; el 19, una escuela. Después un sospechoso bobo exhibicionista que se graba a sí mismo y que llama a una televisión para darse fama, y, por fin, una masacre en su piso casi transmitida en directo.
He seguido el proceso a través de los medios españoles y, gracias a la Red, por Le Monde y un diario hebreo de gran circulación, Yedioth Ahronoth (Por cierto, si Vd. lo lee hoy, viernes, verá que este asunto es la tercera noticia en importancia después del despliegue del ejército israelí, con bonitas ametralladoras, que ha sido agredido con piedras por los palestinos que celebran el Día de la Tierra, y de que el ejército libanés está en máxima alerta)
Bueno, decíamos, las informaciones tienen ciertos aspectos preocupantes, por ejemplo las armas. De acuerdo con las informaciones de los atentados Merah usó siempre las mismas y se referían a un fusil de asalto Kalashnikov y una metralleta de fabricación israelí, una UZI. El fusil se encuentra fácilemente en el mercado negro, el juguete hebreo, bien considerado por los profesionales de los tiros por manejable y fiable, no; suele ser más bien herramienta de escoltas presidenciales. Curiosamente, armado con dos útiles poderosos, en el momento en que es rodeado se defiende, como Gary Cooper, con un Colt 45.
El asalto al piso fue una carnicería. En condiciones normales cualquier perseguido se viene abajo simplemente con el asedio; la falta de luz, de agua, de alimentos, el cansancio físico y un buen negociador, suelen minar su resistencia. La policía conoce miles de trucos bien efectivos en estas circunstancias. El barrio había sido desalojado, no había peligro para otras vidas, un poco de paciencia y una sola bomba lacrimógena, en su caso, habrían sido más que suficientes. Sin embargo se optó por la solución sangrienta, una patrulla de quince valientes del RAID, -cuerpo especial-, deshizo el apartamento a tiros y remató al poco sospechoso de un disparo en la cabeza.
¿Para qué sirve esta violencia barata?. Primero para reforzar al candidato Sarkozy ante los votantes de extrema derecha que se le iban, segundo para que ahora alguien quiera vengar a Merah y empecemos de nuevo; pero, sobre todo y muy especialmente, para sellar una boca.
No encuentro palabras para describir el horror que me produce un chaval de veintipocos años asesinando gratuitamente a la entrada de una escuela. La sangre fría, cogiendo por la espalda a una niña que se le escapaba y rematándola. ¿Hay ideología, religión, cultura que pueda soportar tamaña barbaridad?
Nada disculpa la barnarie, quienes la fomentan son colaboradores necesarios de sus crímenes; en este sentido tengo que preguntarme cómo es posible que la Señora Le Pen disponga de una esperanza de voto del 20% con actitudes tales como pedir que se eche de Francia a los inmigrantes o yendo a bailar con unos alegres "muchachos" vieneses que se reúnen para conmemorar cuando machacaban judíos.
Las Burschenschaften (perdón por el vocablo) son unas Hermandades Estudiantiles cuyos miembros ya no se recuerdan de por dónde están las aulas, que se reúnen cada año en una sonora celebración de mejores tiempos, aquellos en los que era legal perseguir congéneres de otras razas, deporte de amplia tradición europea; son de ver, vestidos con impecables fracs y rematados por unos ridículos sombreritos de colorines que se sostienen de mala manera. Para mayor gracia recuerdan estos tocados a la kippá judía y a ciertos adornos turcos, ¡los blanquitos con la moda de sus enemigos!
Hacia las posiciones políticas de esta señora ha ido derechizando, -sin gran esfuerzo, dicho sea de paso-, su programa el Sr. Sarkozy, preocupado por la pérdida de clientela, ayudado por su ministro del Interior, aquél que cerró la frontera con Italia para que no se colaran tunecinos ni otros africanos muertos de hambre. Es esta repugnante papilla ideológica la que mueve a elementos como el desgraciado Muhammed Merah.
Cuando fue descubierto con tanta rapidez yo ya había apostado que moriría. Toda la historia tiene demasiados elementos oscuros. No me fío nada de los ministros de Interior ni de sus huestes secretas; Sarkozy lo fue, desde su cargo enfrentó con violencia las manifestaciones violentas, fue protagonista de expulsiones masivas y sus servicios secretos prepararon trampas contra sus enemigos políticos, particularemente de su propio partido. Lo de Merah, lamento ser tan suspicaz, me suena a montaje, a forma de ganar votantes.
Primero unos asesinatos que van "in crescendo", el día 11 un militar; el 15, dos; el 19, una escuela. Después un sospechoso bobo exhibicionista que se graba a sí mismo y que llama a una televisión para darse fama, y, por fin, una masacre en su piso casi transmitida en directo.
He seguido el proceso a través de los medios españoles y, gracias a la Red, por Le Monde y un diario hebreo de gran circulación, Yedioth Ahronoth (Por cierto, si Vd. lo lee hoy, viernes, verá que este asunto es la tercera noticia en importancia después del despliegue del ejército israelí, con bonitas ametralladoras, que ha sido agredido con piedras por los palestinos que celebran el Día de la Tierra, y de que el ejército libanés está en máxima alerta)
Bueno, decíamos, las informaciones tienen ciertos aspectos preocupantes, por ejemplo las armas. De acuerdo con las informaciones de los atentados Merah usó siempre las mismas y se referían a un fusil de asalto Kalashnikov y una metralleta de fabricación israelí, una UZI. El fusil se encuentra fácilemente en el mercado negro, el juguete hebreo, bien considerado por los profesionales de los tiros por manejable y fiable, no; suele ser más bien herramienta de escoltas presidenciales. Curiosamente, armado con dos útiles poderosos, en el momento en que es rodeado se defiende, como Gary Cooper, con un Colt 45.
El asalto al piso fue una carnicería. En condiciones normales cualquier perseguido se viene abajo simplemente con el asedio; la falta de luz, de agua, de alimentos, el cansancio físico y un buen negociador, suelen minar su resistencia. La policía conoce miles de trucos bien efectivos en estas circunstancias. El barrio había sido desalojado, no había peligro para otras vidas, un poco de paciencia y una sola bomba lacrimógena, en su caso, habrían sido más que suficientes. Sin embargo se optó por la solución sangrienta, una patrulla de quince valientes del RAID, -cuerpo especial-, deshizo el apartamento a tiros y remató al poco sospechoso de un disparo en la cabeza.
¿Para qué sirve esta violencia barata?. Primero para reforzar al candidato Sarkozy ante los votantes de extrema derecha que se le iban, segundo para que ahora alguien quiera vengar a Merah y empecemos de nuevo; pero, sobre todo y muy especialmente, para sellar una boca.
Comentarios
Publicar un comentario